La Amenaza Compuesta a la Biodiversidad
La biodiversidad del planeta se enfrenta a una crisis sin precedentes, impulsada principalmente por la acción humana. Dentro de las mayores amenazas, dos factores interactúan de forma poderosa y destructiva: el cambio climático y la propagación de las especies exóticas invasoras (EEI).
Estos dos agentes de cambio global no actúan de forma aislada. Por el contrario, establecen una sinergia donde uno amplifica los efectos negativos del otro. El cambio climático, con sus temperaturas crecientes y fenómenos meteorológicos extremos, debilita los ecosistemas y a las especies nativas, abriendo el camino para que las EEI, que a menudo son oportunistas y altamente adaptables, se establezcan y prosperen en nuevos territorios.
Las consecuencias de esta interacción van más allá de la simple pérdida de especies; implican la transformación radical de los ecosistemas. Las especies invasoras pueden alterar ciclos biogeoquímicos fundamentales, como el ciclo del nitrógeno, o aumentar drásticamente el riesgo de incendios forestales catastróficos, liberando más carbono a la atmósfera y, de esta manera, retroalimentando el propio cambio climático.
Comprender la dinámica de esta «amenaza compuesta» es fundamental para diseñar estrategias de conservación y gestión ambiental que sean verdaderamente efectivas, ya que solo abordando ambos desafíos de manera integrada podremos mitigar el daño a la invaluable riqueza biológica de nuestro planeta.